Me llamo Millaray (2021), de Viviana Huiliñir y Claudio Fuentes, ilustrado por Jorge Roa, es un bello libro en su contenido literario y en su aspecto estético, cuidado en todos sus detalles.
Este libro de tapas duras e ilustraciones de brillante colorido nos introduce en el mundo cultural mapuche de la mano de la joven Millaray, que invita a su amiga “huinca” Catalina a pasar las vacaciones al interior de Curarrehue, en el sur de Chile, circunstancia que le permitirá a Catalina conocer la vida y costumbres de la familia de Millaray, pero a la vez experimentar sentimientos que no conocía. La joven adolescente entra por primera vez a una casa de familia mapuche, conoce los árboles sagrados, come alimentos que nunca había probado, conoce instrumentos musicales, toma mate con su amiga junto a la vieja cocina a leña y asiste a una fiesta ritual vistiendo incluso un atuendo mapuche para participar en la ceremonia.
El libro combina elementos del libro álbum, la novela gráfica, el libro informativo y la narración poética muy cercana al lector, incluso al final se incluyen los apuntes sobre la tarea escolar de Millaray sobre aquel verano en tierra mapuche. Se incluyen también mensajes de whatsapp y textos en letra manuscrita.
La tapa y contratapa del libro resumen en una sola imagen el contenido del libro, que el lector sensible debe interpretar. También la tipografía del título y las guardas aportan significado, en este caso, son referencias al tejido a telar mapuche. Hay textos de los poetas Elicura Chihuailaf, Leonel Lienlaf, Jaime Huenún o María Isabel Lara Millapan que complementan la narración. Cierran el libro una bibliografía y un glosario que permiten ampliar el conocimiento del universo mapuche.
Un libro para hablar de pueblos originarios, pertenencia, tolerancia, amistad, diversidad e inclusión. Excelente libro, muy original en su propuesta, que enriquece en forma y fondo la literatura infantil y juvenil chilena.