“Buenas noches, Gorila…”, “Buenas noches, Elefante…”. Se hace de noche en el zoológico y todos los animales van a dormir. ¿O no? ¿Y quién es ese personaje bajito y peludo, con una llave en la mano y una sonrisa traviesa? Parece que el guardián del zoológico no lo ha visto aún, pero el personaje sospechoso sabe muy bien cuál será el próximo paso del guardián.