¡Cuí-cuí-cuidado!

Marilyn Pérez Falcón

Sea en el campo o en la gran ciudad, para conducir un camión hace falta poner atención, ser responsable y también tener un poco de buena suerte. Como los conductores de esta historia son un poco bestias, la suerte parecerá no estar de su lado, sobre todo cuando llegue la vaca policía. Una graciosa anécdota contada a través de onomatopeyas.

SIN STOCK

También te puede interesar

VER TODOS LOS LIBROS

Suscríbete para recibir todas nuestras novedades

ENVIAR

CESTA DE COMPRAS

HAY ARTÍCULOS EN TU CESTA DE COMPRAS